Merecido tributo a la memoria de Francisco del Rosario Sánchez
La grandeza
de Francisco del Rosario Sánchez descansa en varios aspectos dignos de
ponderarse hoy que se cumplen 208 años de su nacimiento.
El patricio Sánchez tenía apenas 5 años cuando el presidente
Jean Pierre Boyer ocupó el territorio del este en un momento en el cual estaba
vigente la que luego fue llamada “independencia efímera” proclamada por Núñez
de Cáceres un 1 de diciembre de 1821.
Sánchez, justo un mes antes de cumplir los 6 años, fue testigo ocular de cómo
Boyer ingresó a nuestro territorio un 9 de febrero de 1822 y se apoderó del
poder.
La llegada de Boyer produjo mucha tensión en Santo Domingo. Todavía no se ha querido discutir a fondo su presencia en nuestto territorio, pues hay documentos que revelan que su ingreso al pais fue motivado por nuestro propio pueblo que lo recibió con alegria y fiesta por todas las partes que se desplazaba. Nadie lo enfrentó. El propio Núñez de Cáceres, principal líder político del momento le entregó las llaves de la ciudad. Las autoridades de entonces, la élite hispana de la época, y los miembros del clero participaron de un Te Deum en la catedral de Santo Domingo, que fue una misa de acción de gracias por la llegada del jefe militar haitiano.
Luego de estar Boyer
varios años en el poder comenzaron las tensiones entre la sociedad de la parte
este de la isla, que todavía no se había proclamado dominicana, y el gobierno
del presidente haitiano.
El
hecho de que este aboliera la esclavitud, confiscara las tierras de los
españoles que antes de su llegada se habian ido del territorio (los llamados
absentista), que le quitara la tierra y los privilegios que disfrutaba la
iglesia católica, que repartiera las mejores tierras entre sus generales, que
las huestes militares haitianas cometieran abusos contra ciudadanos de nuestro
país, generó una gran molestia, sobre todo entre los descendientes de
españoles.
La
poblacion mulata y negra, por su parte, que era la mayoría abrumadora de la
pobacion de entonces, fue pasiva ante la llegada de Boyer pues tuvo muchos
beneficios de ella. Primero, un 10 por cientos de ellos fue liberado de la
esclavitud, recibieron tierras y fueron igualados en derecho con los
descendientes de los españoles.
Pero para 1838, año en el cual Juan Pablo Duarte fundó la Trinitaria, los
descendientes de españoles y mulatos y negros no soportaban el gobierno de
Boyer. La cultura haitiana, su idioma y su religion era muy diferente a la
nuestra.
Entonces
Juan Pablo Duarte, que había venido de Europa con nuevas ideas, conversó con
algunos de sus amigos hijos de españoles y crearon la Trinitaria. Luego
incorporaron a esta a Sánchez, Mella, los hermanos Puello (que habian sido
esclavos de los españoles), y otros mulatos y negros e hicieron una alianza
política que fue definida por Duarte como “la unidad de las razas” y se
comprometieron a luchar contra la ocupación haitiana.
Desde
un principio Sánchez se destacó y aunque su abuelo había sido esclavo, y por
tanto le debía su libertad a Boyer, se dio las manos con Duarte y los
trinitarios y comenzaron la lucha por la separación de Haití.
A
Sánchez se le estima como un intelectual y un hombre de acción que son dos
virtudes difíciles de encontrar en una sola pérsona pues se estima que el
hombre de acción a veces carece de luces intelectuales y el intelectual adolece
de vocación para la vida práctica.
A
Sánchez se le estima como el brazo de la independencia porque si bien
Duarte fue el ideólogo de la república, a Sánchez se le tiene como el gran
organizador de esa epopeya.
Tanto es así que el Manifiesto de Independencia se estima que fue redactado por
él en su condición de abogado. Sánchez fue el gran propulsor de que la noche
del 27 de febrero se proclamara la separación de Haití y la fundacion de la
República Dominicana.
Sánchez
asumió la gran responsabilidad de presidir la primera Junta Provisional de
Gobierno que se formó tras la proclamación de la república.
17
años después de fundada la república Sánchez demostró nuevamente su heroismo
cuando Santana la anexó a España en 1861. Entonces, decidió luchar contra esa
iniciativa del traidor. Fue apresado y fusilado en San Juan de la Maguana un 4
de julio de ese mismo año.
Sus
aportes a la creación de nuestra república lo hicieron merecedor de llamarse
eternamente Padre de la Patria. Hoy le rendimos merecido tributo a su memoria.
Por: Cassandro Fortuna.
No hay comentarios